SER FELICES POR LO QUE TENEÍS

Esta noche he tenido el placer de hablar con toda una señora, qué sigue llevando su elegancia innata, a pesar de sus 81 años.
Le estaré eternamente agradecida, porque ella le dio la vida a mi padre, y él me la dio a mí.
Sentada junto a mi con su pelo blanco, sus mejillas rosadas y esos ojos azules me contaba....

…No entiendo a la juventud, mira cuantas comodidades tenéis y aun así, no estáis contentos. Recuerdo que en este tiempo, cuando ya el sol empieza a calentar, mi madre, tenia un lebrillo que durante la mañana permanecía de pie en un rincón, pero al mediodía, lo ponía en el poyo de la puerta, donde el sol daba prácticamente todo el día.
Al atardecer, cuando la jornada terminaba, llevábamos el lebrillo con el agua ya caliente y lo poníamos en un cuarto y junto a el un cubo.
Así era como nos aseábamos uno por uno toda la familia, igual que ahora…

Lebrillo: Vasija de barro vidriado, de plata u otro metal, más ancha por el borde que por el fondo, y que sirve para lavar ropa, para baños de pies y otros usos.
Poyo.(Del lat. podĭum). Banco de piedra, yeso u otra materia, que ordinariamente se fabrica arrimado a las paredes, junto a las puertas de las casas de campo, en los zaguanes y otras partes